En la Urbanización Font Nova podemos comprobar que, lejos de permitir que esta ex-señal de STOP pueda disfrutar de su jubilación, alguien le ha dado una nueva utilidad.
Una fotografía tomada esta mañana desde un paraje indeterminado de Cerro Mar, que hace 50 años era una montaña y ahora es una montaña con 500 chalets y adosados.